Mareak V, 140 x 140 cm. Horus Gallery

Su Mendia, 140 x 140 cm. Horus Gallery

Egunsentia IV, 100 x 100 cm. Horus Gallery

Mugak XI, 175 x 130 cm. Horus Gallery

Egunsentiak I, 146 x 114 cm. Horus Gallery

Gaua II, 150 x 150 cm. Horus Gallery

Udara, 146 x 114 cm. Horus Gallery

Uharrak I, 190 x 137 cm. Horus Gallery

San Juan Sua, 200 x 200 cm. Sold

Eguzki Aldea IV, 200 x 200 cm. Sold

Bi Zulo, 400 x 200 cm. Sold

Enbatak II, homenaje a Turner, 120 x 120 cm. Sold

Oztopoak V, 146 x 114 cm. Horus Gallery

Gaueko Olatu Handia I, 116 x 89 cm. Coleccion del artista

Solstizioa II, 146 x 114 cm. Sold

Begiak IV, 60 x 81 cm. Sold

Olatuen Azpian, 190 x 130 cm. AiBo Gallery

Pagoki Lehorra, 120 x 120 cm. OA Fine Art

Babel III, 100 x 81 cm. OA Fine Art

Ahaztuak III, 146 x 114 cm. Sold

Kantauri Itsasoa VII, 194 x 130 cm. Sold

Ilargi Gorria I, 81 x 60 cm. Sold

Hurbilketak II, 146 x 114 cm. Sold

Exodus IV, 120 x 35 cm. Sold

Eszena Tokiak I, 180 x 140 cm. Sold

Sua I, 195 x 130 cm. Horus Gallery

Urak I, 195 x 130 cm. Horus Gallery

Eguzki Aldea II, 180 x 140 cm. Sold

Ahaztuak II, 150 x 100 cm. Sold

Eguzki Aldea III, 100 x 100 cm. Sold

Por DUALIDAD se señala la existencia de dos fenómenos o caracteres distintos en una misma persona o en un mismo estado de cosas. Así es como se presenta el proyecto “Loturak vs. Lokarriak” – “Ser/Estar Sujeto”, como una invitación a reflexionar y a analizar la dualidad, tanto a nivel personal como a nivel colectivo presente actualmente en nuestra sociedad.
La serie se presenta como una contraposición dialogante inspirada en los escritos de dos autores. cuya obra, a pesar de tener más de 50 años, sigue siendo contemporánea.
Por una lado Franz Kafka (El proceso, Metamorfosis, Amerika,...), cuyos personajes pasean por un mundo inquietante y de incertidumbre, de miedos y dudas, del que nunca llegan a salir. En la obra “El proceso”, K es condenado por un delito que desconoce, comienza un largo proceso en busca de respuestas sin llegar a conseguir ninguna, e increíblemente, acaba por admitir su condena y asumir su ejecución sin saber siquiera el porqué de la misma.

En este proyecto el personaje perturbado está representado por AL, un individuo sencillo, como muchos otros. AL observa constantemente en el espejo la imagen de su Alter Ego, LA, y reflexiona los por qué de su situación buscando respuestas que le ofrezcan una salida. En definitiva, una solución a sus dudas y miedos.

Por el otro, George Orwell (1984), que en su fantasía distópica muestra un Estado totalitario en el que por encima de la sociedad se sitúa el Gran Hermano, el guardián de la sociedad y el juez supremo que todo lo ve. Un Estado en el que continuamente se ejercen ataduras, se cambian las alianzas para iniciar nuevos conflictos que atienden a sus intereses, reescribiendo el pasado y fabricando una posverdad. Claramente, una predicción de todo lo que está ocurriendo hoy en día. El espectador observa la obra desde esta perspectiva, la masa desde una posición de superioridad, de vigilancia. Pero como sujetos agentes, podemos hacernos conscientes de este “Big Brother”, de esta distopía, y este conocimiento nos hace fuertes para enfrentar y vencer las ataduras y los miedos que nos impone, y subvertirlos creando resistencias y nuevas alianzas que reescriban el presente y el futuro.

Incluso los Dioses dudan, 146 x 114 cm